Contemplación de un elemento de la naturaleza
¿Te has fijado que cuando estás en la naturaleza te sientes diferente?
La tierra y sus elementos nos ayudan a volver al presente, a este preciso instante. Y a respirar de nuevo a nuestro ritmo natural.
Hemos aprendido a vivir a un ritmo impuesto, nos hemos adaptado a lo que se supone que debemos hacer y ser. Y nos hemos llegado a creer que eso es lo correcto, porque llevamos tantas generaciones de imposición del trabajo duro y del deber que nos ha calado.
Pero cuando volvemos nuestra mirada a la naturaleza y la miramos de verdad, despierta en nosotros una respiración diferente, un sentir diferente. Despierta un espacio, una apertura, una paz que en nuestro día a día normalmente nos cuesta sentir. Y que es muy nutritiva para nuestra vida.
Así que te propongo que la incorpores en tus días con un ejercicio muy muy simple y del que me he acordado escuchando a Eckhart Tolle (es un placer escuchar a este hombre, te dejo su web aquí).
Se trata, simplemente, que:
Una vez al día mira un elemento de la naturaleza durante unos instantes
Así de fácil. Prueba ahora mismo, lo más fácil si no tienes mucha naturaleza alrededor es que mires al cielo. Saca la cabeza por la ventana, mira al cielo y respira.
¿Lo has notado?
Es una mini (que a veces te invade y se vuelve maxi) sensación maravillosa. Te re-conecta con la vida. Te ayuda a volver a ti.
Y para que no se te olvide te recomiendo que aquí y ahora decidas un momento del día y un elemento de la naturaleza. Por ejemplo cuando salga de casa por la mañana miraré al cielo, o cuando llegue a casa por la tarde miraré la planta que tengo en el salón. Escoge aquí y ahora un momento y un elemento.
¿Lo tienes?
Apúntalo en el móvil, ponte una nota por si acaso, que sino el día a día tiene muchas probabilidades de hacerte olvidar este pequeño regalo que te quieres hacer. Y si, es un pequeño detalle, que te puede resultar muy muy nutritivo.